martes, diciembre 26, 2006

Per tots els valents que han sobreviscut a la família aquests dies.



Avui publico un article curiós d'un bon amic amb el qual ha fet aquest nadal una mica més agradable.

D.R.A.: http://www.cdros.blogspot.com

¿Quién no se acuerda de la celebre frase navideña “Hola, soy Edu, Feliz Navidad”? La frase fue el gancho publicitario de la campaña navideña de la entonces marca “Airtel” durante las Navidades de 1997, campaña publicitaria que promocionó la posibilidad de felicitar las fiestas a los seres queridos con un aparato móvil desde el sofá de casa.

Hubo un tiempo en el que Papá Noel no tenía “barrigón”, ni esa larga barba blanca, ni llevaba una hebilla dorada en su cinturón y no iba con renos. La leyenda de San Nicolás proviene de la antigua Asia Menor, donde en el siglo III nació Nicolás. Éste después de la muerte de sus padres, donó todas sus riquezas a las pobres ayudándoles hasta que finalmente fue ordenado arzobispo de Mira; de su figura destaca su dedicación a los niños pobres. La leyenda fue evolucionando y con ella la generosidad de San Nicolás se transformó en regalos para los niños que cada 6 de diciembre llevaba en burro a sus casas.

Poco a poco, la tradición fue extendiéndose y deviniendo oral. Llegaron a existir muchas interpretaciones de su existencia, incluso Papá Noel llego a ser un “gnomo”. En Oriente había un San Nicolás de Mira, en Occidente un San Nicolás de Bari y ya en el siglo XVII se cuenta que cruzó el Atlántico junto con los inmigrantes holandeses. “Sinterklaas”, el santo holandés, se tradujo a la fonética inglesa y en la sátira “Historia de Nueva York” del escritor Irving pasó a denominarse Santa Claus.

Un Santa Claus que seguía llevando regalos a los niños vestía de distintos colores: verde chillón, morado y con colores dorados. A finales del siglo XIX, el dibujante alemán Thomas Nast vistió a Santa Claus con un abrigo rojo en la revista “Harper’s” y ya en el siglo XX fue la compañía “Coca Cola” quien encargó al pintor Habdon Sundblom el dibujo de Santa Claus. De tal modo, en 1931 y de la mano de la publicidad de la marca “Coca Cola” nació la imagen que hoy todos conocemos y conforma el clásico Santa Claus de nuestro imaginario colectivo: un anciano gordinflón, sonriente y alegre con una larga barba blanca, vestido de rojo y blanco con una hebilla dorada en el cinturón y su gorrito de dormir.

Desde hace unos Navidades, “Amena” nos ofrecía cada Navidad sus servicios de telecomunicaciones con un sorprendente Papá Noel verde chillón. Las fiestas navideñas de este año, dado el cambio de la marca “Amena” por “Orange”, no disfrutaremos del Papá Noel verde.

Observando los últimos anuncios navideños de servicios triple-play consistentes en telefonía fija, acceso a Internet y televisión y de los servicios multiplay que añaden móvil, seguimos esperando un Papá Noel de color verde mientras tomamos una “Coca Cola” con el Santa Claus de color rojo corporativo que tanto se asemeja a una botella de vidrio de la renombrada marca: los colores rojo y blanco de las pegatinas se funden en el vestido de Santa Claus, el cuerpo de la botella asimila la figura de Santa Claus con su gorda barriguita, el cuello de la botella es la cara sonriente y alegre, y la espuma del gas es el gorro de dormir rojo y blanco.

Es curioso apreciar como el Santa Claus de color rojo, que tiene su origen en la publicidad de la marca “Coca Cola”, se ha vulgarizado en nuestro imaginario colectivo y no resulta distintivo de la marca “Coca Cola”. Mientras el Papá Noel de color verde de la marca “Amena”, que resulta ser el color originario de la figura de Papá Noel, el consumidor sí que lo asocia con la marca “Amena”. En consecuencia, el consumidor diferencia el vulgarizado Santa Claus de color rojo corporativo de la marca “Coca Cola” y el distintivo Papá Noel de color verde de la marca “Amena”

1 comentario:

Lucy in the sky dijo...

Malgrat els excesius dinars, el consumisme i les aglomeracions, haig de reconeixer que... m'agrada el Nadal! Té alguna cosa que fa que em senti bé, sobretot quan avui he obert el meu blog i he vist la felicitació de Nadal d'un amic meu de tota la vida. Moltes gracies Xavi, passen els anys però hi ha coses que, com tu, no canvien mai.
Bones festes i feliç any nou 2007!!

P.D.: Molt xula la història del Pare Noel!